CARBONO VOLUNTARIO
CARBONO VOLUNTARIO
Reduce las emisiones de metano: La producción de biometano captura las emisiones de metano de los desechos orgánicos que de otro modo escaparían a la atmósfera, reduciendo significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero. La combustión de biometano produce significativamente menos contaminantes en comparación con los combustibles fósiles convencionales, lo que genera un aire más limpio y comunidades más saludables.
Mandatos de energía renovable: Los incentivos gubernamentales y los mandatos de energía renovable alientan la adopción del biometano como fuente de energía renovable, impulsando el crecimiento del mercado y la inversión. El biometano desempeña un papel vital en el logro de los objetivos de mitigación del cambio climático al desplazar los combustibles fósiles y reducir las emisiones de carbono en el sector energético. El biometano se alinea con los objetivos globales de desarrollo sostenible al promover el acceso a energía limpia, el consumo responsable y la acción climática.
3 cifras clave
Compensación de la huella de carbono: Las compensaciones voluntarias de carbono permiten a personas y organizaciones compensar sus emisiones de carbono apoyando proyectos que reducen las emisiones de gases de efecto invernadero en otros lugares, como iniciativas de energía renovable, reforestación y eficiencia energética. Los proyectos de compensación de carbono a menudo brindan beneficios ambientales y sociales adicionales más allá de la reducción de carbono, como la conservación de la biodiversidad, el desarrollo comunitario y el alivio de la pobreza. Proyectos como la reforestación y la forestación no sólo secuestran dióxido de carbono sino que también restauran ecosistemas vitales, mejoran la biodiversidad y protegen los hábitats naturales de la vida silvestre.